Prueba a comer ajo y miel en ayunas durante 7 días, ¡y esto le pasará a tu cuerpo!
El ajo es uno de los ingredientes más utilizados en la cocina de todo el mundo. Hace que la comida sepa bien, pero también es muy poderosa y puede curar muchas dolencias.
los el ajo puede reducir la presión arterial alta y el colesterol, prevenir enfermedades coronarias y ataques al corazón. Además, puede detener los efectos de la aterosclerosis.
Si padece problemas de salud cotidianos como fiebre del heno, diarrea del viajero, resfriado, gripe, picaduras de insectos e infecciones, un bulbo de ajo puede ayudarlo.
Además, el ajo puede ayudar a controlar los síntomas de la osteoartritis, la diabetes y el agrandamiento de la próstata.
El ajo puede mejorar su inmunidad y la capacidad del cuerpo para eliminar toxinas. Cuando se combina con cebolla y jengibre, puede ayudar a desintoxicarse de la quimioterapia.
¿Cómo usar el ajo?
La mejor forma de consumir el ajo es crudo, debido a la alicina. Triturar y cortar el clavo y dejarlo 15 minutos antes de consumirlo. Triturarlo activa una reacción que hace que la alicina sea más biodisponible.
Se debe comer con el estómago vacío porque si el estómago está abrumado con la comida, tiene dificultades para procesar y absorber todos los nutrientes de la comida.
-Ajo Crudo y Miel:
Picar 2-3 dientes de ajo en trozos pequeños. Mezclar con una cucharada de miel. Si tomas esta combinación todos los días, te sentirás más enérgico y saludable.
-Ajo para la Gripe:
Usa guantes si tienes la piel sensible y no te frotes los ojos cuando te apliques este tónico porque algunos de los aceites naturales pueden desencadenar una erupción cutánea o una quemadura.
Ingredientes necesarios:
-Aproximadamente media cebolla picada
-5 dientes de ajo, picados gruesos
-2 pimientos picantes, también picados
-1 cucharada de jengibre picado
-Jugo exprimido de 1 limón
– Vinagre de sidra de manzana crudo y sin filtrar.
¿Cómo prepararlo?
– En un bote de cristal de 350 ml a 500 ml colocar la cebolla cortada en trocitos. Luego agregar el ajo picado. Siga con los chiles rojos, semillas y todo.
– A continuación, se coloca con cuidado un poco de jengibre picado. Exprima el limón en un recipiente aparte, tire las semillas y luego vierta el jugo.
– Al final añadir el vinagre de sidra de manzana y dejar un cm de espacio por encima. Cierra el frasco y colócalo en el mostrador o en una despensa.
